En los últimos años, la National Portrait Gallery ha aumentado su interés por el retrato fotográfico y Thomas Manss & Company recibió el encargo de diseñar el catálogo para la exposición titulada Face of Fashion. Uno de los principales objetivos de la exposición era atraer a un público joven.
Desde el principio, el diseño fue tratado como un ejercicio de branding más que un mero proyecto editorial. Convertir el título en una marca abrió nuevas estrategias para la producción de merchandising.