La marca Vivité es un excelente ejemplo de como la mente de un diseñador trabaja. Un análisis riguroso del producto ofrecido por la empresa, ‘el pasaporte de salud’, sugiere que el aspecto médico debe estar en el centro de la comunicación visual.
La connotación médica se crea con una letra inicial de serifa cuadrada que permite ver una cruz en su interior, aunque realmente no esté ahí. El descubrimiento añade un poco de magia que arranca una sonrisa y garantiza que la marca no será olvidada.